Mi corazón te pertenece

Mi corazón te pertenece,
sólo a tí
entre sueños, fantasias
y realidades...
Te amo de la misma forma
en que tu me amas,
te pienso,
te siento,
te sueño
en este mismo espacio,
en este mismo tiempo,
que nos pertenece,
que nos seduce
bajo una mirada de amor
tierna y profunda
que exhalta nuestra alma,
que despierta nuestros sentidos
en este instante
en que los dos somos uno mismo.

En cada segundo te pienso

En cada segundo te pienso,

eres como la sangre que llevo en mis venas

sin poder detener

todo este torrente de pasión.

Amarte es lo mismo

que vivir y soñar con tu sonrisa,

llenar de alegría mi vida.

El canto de los pájaros

es como música para mis oídos...

Te amo, te pienso, te siento,

como se siente cuando se ama

con pasión y locura desenfrenada,

pretendiendo retenerte

en cada suspiro

y en cada palabra que pronuncio.

En mis sueños

En mis sueños me acompañas día a día.

Sueño despierta y sueño dormida

y tu siempre estás aquí,

sin decir nada,

sin pedirme nada

a cambio de tu amor que me invade día a día.

Me dirijo hacia tí

Me dirijo hacia tí como mi sombra...
camino junto a tí sin que lo notes...
soy vida a tus pies,
sombra de tus pasos que me ignoran,
aún cuando me tengan de frente...
No puedo imaginar mi vida sin tí
sin tu sonrisa,
sin tus abrazos.

Junto a tí

Junto a tí cada segundo es primavera.

En el dulce aroma de las flores te percibo,

cual mariposa en busca de néctar,

mientras mi corazón se abre para tí

con una ternura

que era desconocida para mi misma.

Sin tu mirada

Sin tu mirada muero cada día, sin tu sonrisa la vida no es igual.

Contigo, hasta las cosas más simples tienen sentido.

Busco tu sombra

Busco tu sombra

carcomida por el paso de los años.

Tu sonrisa atrapada en el tiempo

en este viejo retrato.

Somos distintos ahora

de los que eramos entonces.

Somos otros los que sueñan,

son distintos nuestros sueños.

Amarte cada día

Amarte cada día
es la razón de mi existencia.
Porque aquí,
te amo con ternura y pasión,
con este amor puro
que traspasa mares y fronteras.

A tus maravillosos ojos que conocen mi alma

Bastó un segundo para amarte,
para quedar atrapada
para siempre en tu mirada.
En un segundo se fundieron nuestras almas,
en ese fuego que nos quema...

Yo, ya no soy la misma,
tu, ya no eres el mismo,
nos pertencemos en este instante
que sólo existe para ambos...
que nos da vida.

Esta sonrisa que ahora se dibuja
en mis labios,
es sólo el reflejo de la tuya,
de esa parte de tu corazón
que sólo yo conozco,
que sólo yo exploro,
cuando nadie más mira las estrellas
desde aquí,
estas estrellas son mías,
como míos son tus ojos
cuando me miran e inundan mi alma
de emoción y alegría.